…Memorias de un cocinero…

La verdad de todo, está al destapar la olla…es por esto que vivo influenciado por eso que no se compra en el mercado, eso que inspira y hace inspirar y hasta desequilibra a cualquier glotón. En cada plato unto pedazos de mi ser, tal cual lo hace un pintor en su lienzo, un poeta con su papel y lapicero, yo hago esa cuenta matemática simple, donde siempre después del igual aparece esa camuflada palabra llamada arte. Por ejemplo:

Producto (chocolate) + utensillo/equipo (cuchillo, espátula, etc.) + sentimientos/emociones (felicidad, buen gusto, sentido común, etc.) + artista (cocinero) = Arte (bombones de chocolate).

…y ustedes me dirán, que tiene de artístico los bombones de chocolate?. Mas de lo que dicen y el doble de lo que no. Además, para el “retruco” (…y tengo el ancho de espadas), también existen frutos de otras ramas del arte, que harían una buena pareja con estos. Ahí vamos, otra vez:

Producto (palabras, acordes, etc.) + utensillo/equipo (guitarra) + sentimientos/emociones (tristeza, romanticismo, etc.) + artista (cantautor, compositor) = Arte (canción de amor).

Cualquier cura con buen gusto (de esos que no existen), casaría a estos productos final de la inspiración, no lo creen así?.
Y ahora si, me tiro de cabeza a la pileta gastronómica y me sumerjo en su etimología, desnudando a todo aquello que gobierna nuestro estómago; es decir: “GASTRO” o “GASTER” = estomago (por ej.: cuando tenemos “gastritis” es la inflamación del estómago) y “NOMIA” = gobernar (por ej.: “autonomía”, que es gobernarse por uno mismo).
La cocina, es un estado de ánimo. Por ello muchas veces queremos comer algo y otras veces otra cosa. Al igual, cuando cocinas, si le pones énfasis y pasión o por el contrario, estas de mal humor…esto se refleja en el producto final. Por si quedo alguna duda: somos artistas. Un pincel y acuarelas, por si solas, no son arte. Necesitan a un pintor para poder plasmar emociones y sentimientos. En la cocina, lo mismo. Una papa no dice nada, pero si aplicamos técnicas, buen gusto y demás…podemos modificarla y hacerla arte.
Con todo lo que conlleva, siempre digo que nosotros, los cocineros, tenemos las mismas (o mas aún) responsabilidades que un medico. Por que?, si bien el doctor cura, previene y demás, un cocinero puede hacer enfermar a alguien, intoxicar o hasta llegar al extremo de matar. Por ej.: el exceso de nuez moscada puede llevar a la muerte. (No se alarmen!, en cantidades muy grandes). Es por eso que no solo es cocinar o dar de comer, sino alimentar a la gente.
Hay que ser muy consecuente, por eso el mejor condimento de la cocina, no es ni la sal ni la pimienta, sino el sentido común, la lógica, la razón…y muchas veces se pasa por alto esto.
Tomando esto como punto de partida y sumándole una gran vocación, podemos realmente “cocinar con amor”, como muchas veces se dice. Hay mucha gente que cocina. Todos alguna vez en la vida, han hecho un huevo frito…pero quien lo sabe hacer correctamente?. El ser humano es un cocinero por naturaleza. La necesidad es la madre de las invenciones. Así surgió el fuego, para hacer más digeribles los alimentos y otorgarles sabores agradables. En el arte en general, y la cocina no es la excepción, las mejores cosas nacieron por necesidad o equivocación.
Trascender es el horizonte y arrebatar los sueños es la osadía constante…