03 marzo 2008

...La última pena...

Sin ansias de ofender a nadie y con el RESPETO como estandarte, acudo nuevamente a este disfraz literario que no me hace apretar los zapatos y me deja caminar por diferentes temas, llevando mi visión constructiva y no destructiva de las cosas a la par…
Sin más preámbulos, los comentarios van a ser bien recibidos y como las hojas no soportan tanto, la difusión también se le agradecerá. Paz...
Cusco, Peru – 26 de Febrero de 2008

Vivo sin mas que lo puesto y apuesto a mas de lo que vivo, entre anónimas encías sangrantes de imperfectas utopías.
Un transparente litro moscovita destornilla el cuadro de la ultima cena, donde Dios mato a los doce y se le dio por jugar de enganche en el medio campo de la moral.
El más informal de los formales, lanza la ostia al aire para ver quien comienza el partido, en el potrero detrás del Vaticano.
La limosna de la fé, es el pan (y otras cosas mas) de cada día de sedientos pingüinos religiosos ocultados en la penumbra de largas túnicas.
Palabras maceradas en un cáliz de oro, propagan transnacionales virus y plegarias virtuales que me tienen la casilla de Hotmail llena.
Miles de fieles que miran sin ver, hacen de hinchada desde el palco de los pobrecitos.
Por todo esto y mas, no me conformo con el empate y dejo al libre albedrío la balanza de lo que te nutre y aquello incompleto como dado de cinco caras. Pero me sigue pareciendo, que cuando un play-mobile estornuda, el resto del mundo (aunque nos sigan vacunando…) se resfría.


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